En una tarde de sol, dos niños que eran amigos desde la infancia, se preparaban para salir a pasear. Vivían muy cerca y al frente de un parque grande y bonito. Aquella tarde era especial pues empezaba la primavera, era domingo y habían muchos niños que jugaban con sus cometas, unos en bicicleta y otros con patines, todo era alegría ya que en primavera todo tiene más color y alegría. Carlos y Adrián, querían saber cual de ellos tendría la cometa más grande, bonita y la que volaba más alto.
Cuando empezaron a correr, todo iba muy bien hasta que la cometa de Carlos se enredó en un árbol. Adrián no se dio cuenta y siguió corriendo muy contento al ver tan alto su cometa de colores. Cuando volteó a buscar a su amigo, lo vio sentado en el parque, llorando desconsoladamente. Al regresar donde estaba Carlos y enterarse de lo sucedido, lo abrazó fuerte y le propuso jugar un rato cada uno con su cometa, con tal de no verlo triste. Así terminó la competencia entre amigos y empezaron a compartir como cuando eran más pequeños.
Aunque dos amigos tengan una competencia, nunca deben olvidar que la amistad está encima de todo, gane quien gane la competencia.
lindo cuentooo
Muy buen cuento!! Sólo le hace falta una linda ilustración.
100% muy bueno el cuento creo que nos da una leccion de como nos debemos llevar en el deporte o en cualquier competencia entre amigos