En las vacaciones del colegio a todos los niños les gusta pasear y relajarse, pero a otros niños como a Gina les gusta practicar su deporte favorito al lado de algunos amigos porque así es mas divertido, ellos iban a la piscina de un club cercano desde muy temprano para competir, amaban la natación. Entre amigos y amigas, a la hora de competir no faltaba alguien a quien no le gusta perder, como paso con David, pues estaba acostumbrado a ganar siempre, y cuando eso no sucedía se frustraba demasiado, pero Gina sabía que debía ayudar a su amigo si llegaba ese momento.
Así, empezaron la competencia los amigos y a la hora que le toco a Gina con David, a los 5 minutos David le gano en estilo mariposa terminando mas que feliz, por supuesto que Gina estaba serena y sonriente . . . y ¿porqué? se preguntaban los demás compañeros, por allí alguien dijo a propósito: Es que Gina es muy buena, quiere mucho a su amigo y se deja ganar, al oír esto David pregunta a su amiga: ¿Es cierto Gina? claro que no!! respondió algo nerviosa.
David pensó, si ponemos a competir a Gina con los demás sabre si compite con ellos igual como lo hace conmigo. Y así fue, Gina les ganaba a todos!! David muy triste se dio cuenta que realmente había perdido y se sentó en el piso a pensar, pero la mamá que observaba todo muy cerca le dijo a su hijo: hijo mío, que no ganes siempre eso no te hace un mal deportista, en la vida siempre habrá alguien que gane o pierda, recuerda que tu mas grande competencia es contigo mismo, debes controlar tu enojo y entender que lo importante es que nunca te rindas y que sigas preparándote. Y así David comprendió que tenía que dar lo mejor y el máximo rendimiento de sí mismo para quedar satisfecho.
Sus cuentos son de mucha ayuda para trabajar con los niños y enseñarle valores.
Gracias y que Dios los bendiga.
Igualmente gracias, lo que mas nos interesa es que los niños aprendan grandes lecciones de vida. Saludos